El sauna proporciona numerosos beneficios. También conlleva una serie de riesgos que desde aquí les vamos a numerar.
En un sauna la
temperatura oscila entre los 80 y los 100 grados centígrados. El hecho de que no
se produzcan quemaduras es porque se combina con una humedad muy
baja (calor seco) y por lo tanto no llega a quemar.
La mayoría de las personas, usamos mal el
sauna. No se deben de tomar más de 2 sesiones
por día y no más de 3 semanales.
Beneficios
Elimina toxinas y aumenta
defensas. Abre los poros y elimina del cuerpo metales pesados (plomo,
mercurio, zinc, níquel, cadmio...). También elimina alcohol, nicotina,
sodio, ácido sulfúrico y combate el colesterol.Aunque también perdemos
minerales, que podemos recuperar con una bebida isotónica.Se pueden llegar a
perder hasta 2 litros de agua junto a las toxinas que eliminamos.
Aumenta las defensas y elimina virus y células tumorales.
Desestresante.Libera endorfinas y
por lo tanto ayuda a combatir el insomnio y el stress.
Mejora la función cardiovascular. Al
dilatar los vasos capilares obliga a bombear al corazón con mas fuerza para
mantener la presión sanguínea.Para personas con afecciones cardiovasculares
se aconseja que el sauna
no supere los 65 grados.
Mejora la respiración. Está
comprobado que los pacientes con enfermedades pulmonares obstructivas
mejoran transitoriamente sus funciones pulmonares.
Mejora la artritis. Ejerce un efecto
positivo sobre el sistema locomotor y el estado psicoemocional aliviando el
dolor artrítico.
Ayuda en general a: reducir la celulitis y adiposidades, torceduras, neuralgias, bursitis, espasmos musculares, rigidez articular y en general dolencias óseo-musculares.
Un sauna puede resultar ser peligroso para quienes padecen determinadas enfermedades del corazón, ya que sudar abundantemente provoca se concentren también los fluidos corporales, por lo que la sangre se torna más densa y esto puede provocar un ataque cardiaco. Por ello, los especialistas recomiendan tanto en caso de hipertensión como en personas cardiópatas consultar con el médico la conveniencia o no de acudir a un sauna. Asímismo, hay estudios médicos que advierten de que el abuso de las sesiones de sauna puede ser perjudicial para la vida sexual. Esta conclusión se fundamenta en que el calor de una sauna puede reducir drásticamente la cantidad y calidad del semen masculino, y en el caso de las mujeres, ocasionar fuertes hemorragias menstruales e incluso el interrumpir la ovulación. Otro dato muy importante arrojan estudios realizados en EEUU, que demuestran que los bebés nacidos de mujeres que utilizan el sauna con frecuencia presentan el doble de probabilidades de padecen espina bífida, a consecuencia del excesivo calentamiento del útero. Por ello, se advierte de que la mujer embaraza no debe acudir a saunas y quienes planeen quedarse embarazadas deberían limitar cada sesión a 15 minutos entre periodos de enfriamiento.
Precauciones
Entrar en el
sauna con hambre, con el estómago lleno (deje
que traanscurra como mínimo una hora desde la comida) o en estado de
agotamiento.
Durante la sesión no beba líquidos, ya
que no se produciría la desintoxicación corporal. Después, tome zumos de fruta
diluidos en agua o simplemente agua mineral.
No realice ejercicios de gimnasia dentro
de la sauna,
ni se dedique a conversar porque se "cargan" la respiración y la circulación.
No se duche después del sauna con agua caliente.Hágalo con agua templada.
JACUZZI
Baño muy relajante.
Se trata de un
baño en el que se inyectan partículas de aire a presión a través de unos
orificios en la bañera - dirigidos principalmente hacia las piernas, la espalda,
los brazos e incluso el cuello - produciendo un burbujeo constante, efectuándose
así un poderoso y vigorizante masaje.
Puede tener incorporado ozono, con la riqueza demostrada que supone, siempre que
se tomen las debidas precauciones. En otras ocasiones, en vez de poros de aire,
se utiliza una manguera con agua termal a dos atmósferas de presión, con la que
se realiza un vigoroso masaje que en condiciones normales no podría aplicarse.
Los beneficios del Jacuzzi son numerosos
El uso del
calor se aconseja en muchas personas con artritis y condiciones relacionadas. Su
doctor puede ayudarle a determinar si esto es apropiado para usted. Los
beneficios del uso del calor incluyen relajación muscular, reducción del dolor y
la rigidez y mayor facilidad para ejecutar ejercicios y actividades cotidianas.
El agua caliente es una manera especialmente buena para aplicar calor a las
áreas afectadas por la artritis. El calor moderado brinda alivio del dolor
articular e incrementa la capacidad para hacer ejercicios de amplitud de
movimiento y fortalecimiento